Cuando aún perdura la conmoción por la doble tragedia que implicó el incendio de una vivienda en el boulevard Serafini, con la muerte de dos pequeños hermanos, la falla crucial que implicó la demora en transmitir a tiempo la información a los bomberos voluntarios determinó la decisión de iniciar una campaña de concientización.
Como ya informó Totoral Blog, tanto la policía como el cuerpo de servidores públicos señalaron que cuando se desató el siniestro que costó la vida a Camila y Lucas Arriola, la comisaría recibió una llamada telefónica que sólo alertó sobre un incendio en una casa "al lado de la familia Gómez", sin dar más precisiones, tras lo cual la comunicación se interrumpió. El aviso fue transmitido -según dijo el comisario Dardo Giménez- a la guardia de bomberos voluntarios, pero recién cuando se receptó una segunda llamada con más precisiones fue posible actuar. Los minutos que habían transcurridos eran vitales y cuando se acudió en auxilio de la familia que vivía el drama, no se pudo evitar el desgraciado desenlace.
A consecuencia de ello, el cuerpo de bomberos voluntarios tomó la determinación de elaborar una campaña de difusión y concientización en la comunidad, para lograr que todos los vecinos conzcan fehacientemente los pasos que dar ante una emergencia y la necesidad de que las llamadas de alerta se realicen al número preciso y conteniendo toda la información imprescindible en cuanto a la localización del siniestro. El tema fue motivo de análisis, incluso, en la última sesión del Concejo Deliberante, donde se valoró la necesidad de llevar adelante la campaña.