El Tribunal Superior de Justicia de la provincia dio un drástico giro en el proceso judicial contra una campesina del norte provincial y ordenó frenar el desalojo de la mujer que había sentenciado la Justicia de Deán Funes. Se trata de Ramona Marcelina Jiménez, de 78 años, a quien el tribunal deanfunense le ordenó desocupar un campo de 85 hectáreas en Rosario del Saladillo, donde vive y trabaja desde hace más de 40 años. El TSJ anuló aquella sentencia y reenvió la causa a la cámara de Deán Funes para que emita un nuevo fallo.

Los antecedentes

En marzo de 2007, la Cámara Criminal, Correccional, Civil, Familia y del Trabajo de Deán Funes revocó un fallo en primera instancia que había sido favorable a la campesina. Este tribunal también le ordenó a Jiménez devolver la propiedad que explotaba en el paraje Pozo del Buey, departamento Tulumba, al ex presidente comunal de Rosario del Saladillo, Isaac López. Según publicó el diario La Voz del Interior, López es padre de Isaac "Chachi" López, actual director de la delegación Córdoba de la Anses. Este funcionario nacional fue legislador provincial por el departamento Tulumba y estuvo al frente de la Unidad Ejecutora para el Saneamiento de Títulos. Este organismo provincial tiene a su cargo la aplicación del Programa Tierras para el Futuro, creado durante el gobierno de José Manuel de la Sota. Su principal objetivo es prestar asesoramiento técnico a quienes tengan problemas para la obtención del título de propiedad y propiciar el saneamiento de los dominios de inmuebles, sobre todo en zonas rurales.

Ramona Jiménez fue a pedir ayuda a la Secretaría de Justicia, de la cual depende la Unidad Ejecutora de Saneamiento de Títulos. Recorrió los 180 kilómetros que separan a su pueblo de la ciudad de Córdoba acompañada por vecinos y con una carpeta con documentación que avalaba su versión sobre la propiedad del campo.

El abogado de Ramona Jiménez, Sergio Salomón, planteó un recurso de casación contra el fallo de la Cámara de Deán Funes, pero el tribunal se lo denegó. Entonces, presentó un recurso directo ante el Tribunal Superior, que ahora resolvió que el recurso de casación fue mal denegado por los jueces deanfunenses, reenvió la causa a esa cámara y le ordenó dictar un nuevo fallo.